Método Suzuki

Todos los niños pueden desarrollar su talento musical si se hace de una forma adecuada, positiva y reforzando su progreso. La música les aporta valores como la concentración, la coordinación, la inteligencia emocional, la empatía, el trabajo en grupo o el desarrollo de la creatividad. Trabajarlo cuanto antes es fundamental en su desarrollo integral como personas.

Nuestras clases están programadas de manera secuencial para que el proceso sea natural en todo momento para nuestros alumnos.

También conocido como el Método de la Lengua Materna. El Método Suzuki está basado en la educación del talento partiendo de la base de que todos los niños pueden aprender música y desarrollar la habilidad de tocar un instrumento si les presentamos las condiciones adecuadas para ello.

El Dr. Suzuki asoció el aprendizaje del instrumento a la adquisición del habla haciendo paralelismos entre un desarrollo y el otro.

Antes de hablar el niño ha escuchado en su entorno muchísimas horas de las palabras que luego aprenderá, es entonces cuando los padres empiezan a introducirle palabras muy cortas y sencillas tanto de memorizar como de pronunciar (papa, mama…)

Cuando el niño lo consigue se activan refuerzos positivos que estimulan y refuerzan el aprendizaje, y así poco a poco ir ampliando y enriqueciendo el vocabulario.
En el aprendizaje instrumental sucede el mismo proceso: gracias a la repetición, la introducción paulatina de conocimientos, la motivación, la cooperación de los padres se puede llegar a la habilidad con el instrumento.

Ningún padre haría cierta la afirmación de que su niño no podrá hablar porque TODOS, antes o después lo harán. Entonces, ¿Por qué se permite que alguien diga que un niño no vale para la música?

¡El método Suzuki es por tanto un método para todos!

La integración de los padres en la educación es algo esencial para el éxito y de igual forma lo es en la educación musical.

Su papel no se limita a la asistencia a la clase, es un papel activo: debe ser su guía durante el trabajo en casa con las pautas que el profesor le da.

El ambiente de la clase: lúdico y distendido debe proporcionarse también en casa para que el niño no se encuentre solo en su proceso de aprendizaje.

La comunicación con el profesor debe ser algo indispensable para saber cómo han de realizarse lo ejercicios y cómo se ha de trabajar.

Desde que nace un niño puede estar en contacto con la música y puede acercarse a ella estimulando sus capacidades y su inteligencia, pero es desde los 3 años cuando un niño empieza a desarrollar sus cualidades motrices, su coordinación su capacidad mental y auditiva de una forma evidente.

No es una edad fijada, todo es generalizado: cada niño tiene su propio proceso de crecimiento y cada uno tiene sus tiempos por lo que hay que adaptarse a ellos.
Todas las edades son buenas para querer acercarse y aprender música.

Es muy importante que cada niño sienta que aprende y que va adquiriendo habilidades y para ello debe sentir que se supera día a día y que aprende cosas diferentes.

Por tanto, el ambiente tanto de las familias como de las clases debe ser motivante y que refuerce sus conocimientos poco a poco.

Se debe plantear como un juego educativo en el que se den situaciones relajadas y de diversión pero que estén cargadas de conocimientos y de valores que hagan que el alumno pueda disfrutar con la música.

Los niños tienen una gran capacidad de retención y una memoria en pleno desarrollo, por lo que pueden aprender muchísimo auditivamente.

Si recordamos la forma de aprender a hablar de un niño… ¿Cuántas veces ha escuchado mamá antes de decirlo? Muchísimas ¿Verdad?

Pues en música ocurre lo mismo. Si ha escuchado las canciones anteriormente tendrá mucha más facilidad para aprenderlas, incluso su oído se refinará atendiendo a cuestiones musicales.

Es importante, entonces, que se escuchen las piezas como algo diario y se integre en el día a día de un niño llegando a familiarizarse con las mismas.

Los niños reciben tanto clases individuales como colectivas. ¿Por qué?

Pues porque en las individuales se avanza con cada niño en particular y se atiende a las necesidades específicas que plantea cada alumno; pero en grupo los niños disfrutan y aprenden a tocar juntos desde muy temprana edad.

Además comparten con niños de edades y niveles semejantes sus conocimientos y se motivan viéndose formar parte de un conjunto.

Se refuerzan y repasan conceptos generales y las familias encuentran lugar donde conocerse y compartir opiniones que a todas ellas les pueden interesar.

Los instrumentos

Violín

Viola

Violonchelo

Piano

Para inscribirte en alguna de nuestras actividades pide una cita en nuestro centro para que te podamos informar sobre cómo hacerlo.

Pedir cita